domingo, 11 de mayo de 2014

El Milagro de la Maternidad, II Parte



¿Por qué decidieron intentarlo una vez más?
Después de la muerte de Jonatan quede muy enojada y con muchos temores, habíamos decidido con mi esposo ya no seguir intentándolo y que me operaría para no volver a salir embarazada. Esperamos que pasara el tiempo y que bajara nuestro dolor, volvimos a hablar al respecto, pedimos consejo para buscar la dirección de Dios.


Muchas personas nos decían que ya no lo intentáramos, que por qué no adoptábamos un niño si tanto era nuestro deseo de un hijo, pero otras personas oraban por nosotros y nos decían que Dios iba a darnos ese bebe que deseábamos y decidimos volver a intentarlo.


En el intento por salir de nuevo embarazada la doctora me mando a hacer los exámenes de Toxoplasmosis (que es la condición que padezco) y estaba positiva, por lo que no podía salir embarazada porque sería aborto seguro. Primero debía tomar el tratamiento para desactivarla y luego iniciaríamos el proceso para salir embarazada, caí en depresión, no quería tomar ningún tratamiento, pero ya tenía cinco semanas de embarazo.


Alma mía, en Dios solamente reposa, porque de Él es mi esperanza.
El solamente es mi roca y mi salvación. Es mi refugio, no resbalaré.
En Dios está mi salvación y mi gloria; en Dios está mi roca fuerte, y mi refugio.
 Salmos 62:5-7


¿Durante el embarazo como estaba tu corazón y el de tu esposo?
Estábamos temerosos y contentos a la vez, a pesar de las circunstancias confiábamos en Dios, en que Él iba a hacer Su voluntad en nosotros.


¿Cómo te sentiste cuando nació Abigail y cómo ha sido tu vida después de ella?
Tenía sentimientos encontrados, sentía mucha alegría y a la vez mucho temor e incredulidad, pero Dios en su amor y misericordia nos mostró que Él tenía el control y que el seguiría cuidando a Abi como lo había hecho desde el principio.


Abigail significa “Padre de alegría o Alegría del Padre, mujer de gozo o fuente de alegría”. Nació el 13 de Marzo del 2013, peso 5 libras y 12 onzas. Fue necesario que me inyectaran el anticuagulante en el vientre doscientas cuarenta veces.


Pasaron trece años para ver este milagro en nuestras vidas, ahora que la tengo sé que es una gran bendición ser madre. Es un amor tan grande que no lo puedo explicar, es lindo saber que ella está con nosotros, es un pedacito de cielo que Dios nos dio.


Porque tú formaste mis entrañas; tú me hiciste en el vientre de mi madre.
Te alabaré; porque formidables, maravillosas son tus obras;
 estoy maravillado y mi alma lo sabe muy bien.
No fue encubierto de ti mi cuerpo, bien que en oculto fui formado,
y entretejido en lo más profundo de la tierra. Salmos 139:13-15

¿Danelia, qué consejo le darías a otras mujeres que tienen el anhelo de ser madres pero que sus cuerpos no responden de la forma como deberían?


Prueben y vean que el Señor es bueno; dichosos los que en Él se refugian.
Teman ustedes sus santos, pues nada les falta a los que le temen. Salmos 34:8-9


Que en medio de nuestra incredulidad Dios hace grandes cosas en nuestras vidas, que no se desanimen, que continúen orando y creyendo que Dios les va a conceder los deseos de su corazón conforme a su voluntad. Él lo hizo en mi vida, fueron trece años de espera, de pruebas, de sufrimiento y paciencia. Él también puede hacerlo en tu vida ¿lo crees?, al que cree todo le es posible.


Jesús le dijo: Si puedes creer, al que cree todo le es posible. Marcos 9:23



No hay comentarios:

Publicar un comentario