miércoles, 18 de marzo de 2015

No es bueno que el hombre esté solo




A menudo cuando he leído este verso, por lo general, me he enfocado en la segunda parte "le haré ayuda idónea"; pero, sabes lo que implica "no es bueno que el hombre esté solo..."


Implica:

* No es bueno que el hombre esté solo, guiando a su familia hacia Dios, mientras su ayuda idónea busca otros intereses alejados de los propósitos de Dios.

* No es bueno que el hombre esté solo en la Iglesia, porque a su ayuda idónea le dolía la cabeza, andaba en sus días difíciles o simplemente no quería acompañarlo.

* No es bueno que el hombre esté solo sirviendo al Señor, mientras su ayuda idónea está cargada y cargándolo a él porque no le dedica tiempo suficiente a la familia por pasar metido en la Iglesia.

* No es bueno que el hombre esté solo buscando el liderazgo en la Iglesia, mientras su ayuda idónea no lo apoya, porque no eran esos sus planes cuando se caso, ella lo quiere para ella sola y eso demanda mucho tiempo y sacrificio.

* No es tiempo que el hombre esté solo porque Dios permitió que fueras su ayuda idónea que le ayudara a facilitarle la vida, no a ser una carga para él.


En el transcurso de mi vida dentro de la Iglesia, he visto como muchos hombres han sido aniquilados en el servicio y en el liderazgo, han sido castrados (perdón por la expresión) por sus ayudas idóneas; porque a ellas no les parecían las decisiones que su esposo tomaba en pro de la gran comisión y lo miraban como una amenaza para su matrimonio.

Fuimos creadas para ser "ayudas idóneas" no "estorbos idóneos". No seamos piedras de tropiezo en sus vidas, alentemoslos a servir a Dios, en sus manos están más seguros que en las nuestras.