lunes, 2 de enero de 2017

Propósitos, resoluciones, metas, planes...



La mayoría de las personas al comenzar un año, se traza metas, propósitos, resoluciones o planes para el año que recién comienza. Muchas se frustran por no haber alcanzado aquello que se propusieron el año anterior; otros ven el año nuevo, como una oportunidad para reiniciar sus metas, carreras, casarse, buscar un mejor empleo, retomar su vida en general.

¡Ha empezado el 2017... no te pongas metas... simplemente ajústate al plan de Dios!.- Pastor Gustavo Zepeda

"Lo conozco yo, el Señor, que escudriño la mente y pongo a prueba el corazón; y que pago a cada uno según su conducta y según el resultado de sus obras". Jeremías 17:10

Dios desea que sus hijos cumplamos sus planes basados en hacer su santa voluntad, no la nuestra. Nos veremos probados a seguir nuestros propios deseos, pero si no están de acuerdo a los propósitos que Dios tiene para nuestra vida, muy probablemente, al final no serán de bendición sino de perdición, pues nos harán perder la visión celestial y nos alejarán de la carrera.

"Yo no puedo arruinar el plan de Dios, pero si puedo arruinar mi vida".- Pastor Gustavo Zepeda


¿Cómo hacer la voluntad de Dios?


"Señor, examina y reconoce mi corazón; pon a prueba cada uno de mis pensamientos. Así verás si voy por mal camino, y me guiarás por el camino eterno". Salmos 139:23-24

¡Qué oración más sincera! El salmista, le pedía a Dios que lo “examinará” y lo “probará” para que lo corrigiera si iba por mal camino. De la misma forma, no debemos sentir temor de pedirle a Dios que haga con nuestras vidas, pero como estamos tan aferrados a nuestros planes o sueños, queremos que Dios simplemente les de un "VISTO BUENO".

En la historia del rey David, podemos ver que muchas veces cometió errores, hasta inclusive planeó la muerte de una persona, pero siempre se arrepentía, sabía que Dios lo disciplinaría y nunca se alejó de la presencia de Dios, por lo cual El lo llamó: "Un hombre conforme a mí corazón".

Hagamos un auto-examen de nuestros corazones, hagamos preguntas sincera como...
¿Es lo que Dios quiere para mi vida?
¿Glorifican mis planes a Dios?
¿Estas metas son santas?

Algo que debemos considerar, es que no vivimos tan sólo para el futuro aquí en la Tierra, sino para la eternidad, lo que hagas o dejes de hacer con nuestra vida hoy, repercutirá en la eternidad.

Antes solía fijarme resoluciones, trazarme metas y al final no terminaba haciéndolas, lo cual me hacía sentir frustrada. Desde hace un par de años, me concentró en mi verso favorito, sé que es algo que siempre tendré presente...

"Tú Señor, cumplirás en mí tus planes; tu misericordia, Señor, permanece para siempre. Yo soy creación tuya. ¡No me desampares!" Salmos 138:8

* Dios tiene grandes planes para mi vida, eso me da propósito.
* Sus misericordias son nuevas cada día, eso me da esperanza.
* Soy su creación, eso me da identidad.
* Nunca me desamparara, eso me da seguridad.

Dios tiene grandes e inimaginables cosas para nuestras vidas, no vivamos neciamente para las cosas terrenales. Dejemos que Dios cumpla su propósito en nuestras vidas.

"¿Cuál será le meta dada por Dios que pueda ser impedida, incierta o imposible? Todo es posible con Dios y todo lo puedo en Cristo que me fortalece. Nadie puede evitar que seamos lo que Dios quiere que seamos, salvo nosotros mismos".- Neil Anderson

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