Pastor Gustavo Zepeda
Hay una palabra que debe caracterizar este año y toda nuestra vida, la palabra es "COMPROMISO".
La cultura actual mira el matrimonio bajo perspectivas equivocadas:
1. Como un compromiso desechable... Eso es marca diablo
2. Como el medio para ser feliz... "Sin ella/él no soy feliz, no quiero estar solo/a".
3. Como un medio de realización... "Sino me caso soy un fracaso".
4. Como una meta para otras metas... "Voy a casarme con alguien para tener hijos, huir de las presiones en casa".
5. Como una carga o estorbo... "No voy a casarme mientras no finalice mis estudios, tenga mi carro y mi casa", o no quieren tener hijos o se demoran en tenerlos.
Casados: ¿Para qué se casaron?
Solteros: ¿Para qué se quieren casar?
Principios acerca del compromiso matrimonial...
1. Dios es el que une...
"Unos fariseos se acercaron y trataron de tenderle una trampa con la siguiente pregunta: ¿Se permite que un hombre se divorcie de su esposa por cualquier motivo? Jesús le respondió: ¿No han leído las Escrituras? allí está escrito que, desde el principio, "Dios los hizo hombre y mujer". Y agregó: "Esto explica por qué el hombre deja a su padre y a su madre, y se une a su esposa, y los dos se convierten en una sola". Como ya no son dos sino uno, que nadie separe lo que Dios ha unido". Mateo 19:3-6
Dios decidió juntarnos con nuestro cónyuge para toda la vida. Los hijos no nos unen, son un fruto del matrimonio. Ni siquiera es el amor del uno por el otro lo que nos une.
Hay varios grupos de casados:
- Llegaron casados a la iglesia.
- Casados pero solo un cónyuge se reúne y es salvo: Debe hacer todo lo posible por ganarlo para el Señor, en lugar de luchar por el matrimonio."Mujeres, estad sujetas a vuestros maridos; para que también los que no creen a la Palabra, sean ganados sin palabra por la conducta de sus esposas, considerando vuestra conducta casta y respetuosa". 1 Pedro 3:1-2
- Llegaron solteros a la Iglesia y se casaron acá.
- Los solteros/as que se desesperaron y se fueron a casar a su manera sin consejo o en contra del consejo. Un soltero/a no debe pensar que Dios tendrá misericordia de él/ella si se casa en yugo desigual, eso es orgullo y es actuar con alevosía y ventaja. "Su corazón es sabio, y grande es su poder; nadie puede desafiarlo y salir bien librado". Job 9:4
Compromiso matrimonial es estar comprometido a que si Dios me unió es para toda la vida.
El que separe lo que Dios unió, se mete en problemas, delante de Dios no es válida la separación.
Somos símbolo de Cristo y la Iglesia, por lo tanto, así debemos ser con nuestro cónyuge. El que se divorcia carga con la responsabilidad del divorcio.
Solteros: Es mejor seguir consejos de con quién debo casarme? Yugo desigual, listo en carácter, preparado económicamente.
Nadie debe soñar con un matrimonio perfecto. El único matrimonio perfecto es el de Cristo con su Iglesia cuando sucedan las Bodas del Cordero.
2. El matrimonio es un pacto con Dios
Dios creo el matrimonio... para Él, no para nosotros...
"Así como la Iglesia honra a Cristo, así también las casadas deben honrar a sus esposos en todo. Esposos, amen a sus esposas, así como Cristo amó a la Iglesia, y se entregó a sí mismo por ella". Efesios 5:24-25
Los esposos deben mostrar amor siempre, deben santificar (ayudarles a crecer) a sus esposas, por ello, él debe ser maduro espiritualmente.
Las esposas deben sujetarse a sus maridos, respetarlo toda la vida se lo merezca o no se lo merezca. La falta de sujeción o irrespeto es un problema espiritual. Está quebrantando un mandamiento. Cuando dos personas están bien con Dios, están bien entre ellos, eso crea un matrimonio más sólido.
Solteros: No se casen mal, no se casen por emociones, no se casen por egoísmo hormonal, sino estás listo para casarte, le complicarías la vida a tu cónyuge. Aprovecha este tiempo de soltería para estar a solar con Dios.
"No es su amor lo que sostiene el matrimonio sino que es el matrimonio lo que sostiene el amor.- Dietrich Bonheffer
3. Compromiso matrimonial es compromiso a trabajos distintos y complementarios
Ella es ayuda idónea. Él es la cabeza del hogar.
Dios creó a Eva para que fuera la ayuda idónea de Adán.
La mujer es ayuda para el hombre no para cubrir una necesidad, no para realizar sueños o alcanzar metas, sino para hacer la gran comisión. Los esposos necesitan la ayuda de sus esposas en el área espiritual. El ejemplo de Aquila y Prisicila (Hechos 18), siempre se les menciona juntos. Fueron discipulados por Pablo y ambos discipularon a Apolos.
"Déjenme decirles lo siguiente, amados hermanos: el tiempo que queda es muy breve. Así que , de ahora en adelante, los que estén casados no deberían concentrarse únicamente en su matrimonio". 1 Corintios 7:29
Los apóstoles viajaban junto a sus esposas cumpliendo la gran comisión..."¿Y acaso no tenemos derecho a traer con nosotros una esposa creyente, como lo hacen los apóstoles, y Pedro y los hermanos del Señor?". 1 Corintios 9:5
"Todo lo hizo hermoso en su tiempo". Eclesiástes 3:11
"Quisiera que estén libres de las preocupaciones de esta vida. Un soltero puede invertir su tiempo en hacer la obra del Señor y en pensar cómo agradarlo a él; pero el casado tiene que pensar en sus responsabilidades terrenales y en cómo agradar a su esposa; sus intereses están divididos. De la misma manera, una mujer que ya no está casada o que nunca se ha casado puede dedicarse al Señor y ser santa en cuerpo y en espíritu; pero una mujer casada tiene que pensar en sus responsabilidades para imponerles restricciones. Mi deseo es que han todo lo que les ayude a a servir mejor al Señor, con la menor cantidad de distracciones posibles". 1 Corintios 7:32-35
Solteros: Programense para hacer discípulos.
Casados: Revisen su matrimonio, crezcan en hacer discípulos.
4. El compromiso matrimonial es ser para la gloria de Dios.
Haga o renueve este compromiso matrimonial:
CASADOS: Yo, me comprometo, a cumplir el Pacto que hice con Dios en relación a mi cónyuge, TODA mi vida. Me comprometo a cumplir el plan para el cual Dios nos unió: Juntos cumplir la gran comisión.
SOLTEROS: Yo, me comprometo a usar mi soltería para cumplir la gran comisión y me comprometo a esperar a que sea Dios quien me junte, cuando El decida, con mi futuro cónyuge, para cumplir juntos la gran comisión.
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