lunes, 19 de enero de 2015

La Esposa Excelente



El Rey Lemuel escribe: “Mujer virtuosa, ¿quién la hallará? Porque su estima sobrepasa largamente a la de las piedras preciosas” (Proverbios 31) El vocablo traducido “virtuosa” en el texto hebreo significa “fuerza” o “fortaleza”. Aquí se refiere a la esposa como una mujer de fortaleza: fuerte espiritual, moral, mental y físicamente. Esta mujer marca una diferencia en la sociedad. Es una mujer que no tiene precio: “Su estima sobrepasa largamente a la de las piedras preciosas”. Eso significa que vale más que los tesoros terrenales.

De aquí tomamos seis cualidades específicas que caracterizan a la esposa excelente:

Su carácter como esposa
“El corazón de su marido está en ella confiado” (v. 11)

Este esposo ve a su esposa como confiable, algo que le permite trabajar lejos de casa, confiado en su fidelidad, integridad, discreción y cuidado de todos sus intereses… Como resultado, el marido “no carecerá de ganancias” (v.11) debido a su cuidadosa mayordomía.

Del lado personal, “le da ella bien y no mal todos los días de su vida” (v.12). Con los mejores intereses de su marido como prioridad, hace todo lo que puede para fortalecerlo y animarlo. Su dinero, posesiones y recursos están con ella. Nunca habla mal de él ni difama su carácter ni en público ni en la privacidad de su familia. Y ese es su comportamiento “todos los días de su vida”. Su amor por él y la devoción por el hogar no fluctuán con las cambiantes circunstancias de la vida. La pureza y el poder de su devoción nunca cambian.

El esposo cosecha los beneficios de esa fidelidad: “Su marido es conocido en las puertas, cuando se sienta con los ancianos de la tierra” (v.23). eso significa que es estimado y respetado por sus conciudadanos, en parte porque ella ha creado un mundo para él en el que puede ser todo lo que Dios quiere que él sea. Ese es el por qué ella ama servirle.

Su devoción como ama de casa
“Busca lana y lino, y con voluntad trabaja con sus manos” (v.13)

Una de sus primeras prioridades es vestir a su familia. Buscar lana y lino, en vez de simplemente usar, significa que se entrega a la búsqueda de productos de calidad. La lana se usaba para hacer ropas para las épocas frías del año. El lino es más liviano, y, por lo tanto, más apropiado para la ropa de las épocas cálidas. Para ella, hacer ropa para su esposo y sus hijos era un gozo.

Es como nave de mercader; trae su pan de lejos”. Viajes continuos al mercado local es busca de los mejores precios, no era su práctica. Viajaba distancias para conseguir la mejor comida al mejor precio. No hacía sus compras apresuradamente… Eso requería un buen plan y una buena administración.

Se levanta aun de noche y da comida a su familia y ración a sus criadas”. Esta esposa trabajadora no solo comenzaba su propio trabajo a una hora tan temprana, sino que, además, repartía las diferentes tareas a sus criadas que servían en la casa. Así demostraba su liderazgo.

La ama de casa tiene que combinar elementos de una economista, supervisora y administradora de negocios para analizar los productos disponibles, ejercer sabiduría e intuición para hacer compras inteligentes y asignar las tareas a los empleados de su casa. Al mismo tiempo tiene que cumplir sus responsabilidades de esposa para su marido y proporcionar cuidado cariñoso y tierno para todos sus hijos.

Considera la heredad, y la compra y planta viña del fruto de sus manos” (v.16). Es una excelente empresaria, su marido no le dio dinero para comprar la heredad, ella la compró y plantó la viña de sus ganancias. “Hace telas y vende, y da cintas al mercader” (v24) Además de sus responsabilidades familiares y del hogar, gana dinero adicional para sí misma, haciendo y vendiendo un producto útil. Note, sin embargo, que no mezcló su dinero con el efectivo diario del hogar, lo separaba hasta que llegara el momento correcto.

Ciñe de fuerzas sus lomos, y esfuerza sus brazos” (v.17) Es una mujer fuerte en función de autodisciplina, entrega a su familia, y amor por su marido. “Sus brazos son fuertes” se refiere a su fortaleza física que es el resultado de su trabajo diario. La motivación es un elemento clave en cualquier tarea, y esta mujer estaba muy motivada.

Ve que van bien sus negocios; su lámpara no se apaga de noche” (v.18) Habiendo comprado el campo y plantado la viña, no solo consigue una ganancia económica, sino también la bendición espiritual de ver a su familia prosperar como resultado de su trabajo.

“No tiene temor de la nieve por su familia” (v.21) significa que estaba bien preparada para el invierno… tenía suficientes mantas para cubrirse en la noche y ropa caliente para los días de frío. Pero no se contentaba solo con la ropa funcional. Deseaba que la familia tuviera buena apariencia.

Ella se hace tapices; de lino y purpura es su vestido” (v.22) Agradecida por la belleza externa con la que Dios la ha bendecido, se viste de tal manera que pone de manifiesto su belleza delante de su marido. No la exagera con sea ni oro ni perlas. En su lugar escoge lino, que no era una ropa particularmente cara… Y la belleza del color púrpura destacaría su propia belleza. De modo que evita el extremo del despliegue ostentoso mediante la selección de una simplicidad elegante.

Su generosidad como vecina
“Alarga su mano al pobre, y extiende sus manos al menesteroso” (v.20)

Tan devota y cariñosa como es hacia su familia, no desatiende a otros. Demuestra su compasión por los pobres al implicarse personalmente en sus angustias. Extiende su mano, los toca donde les duele, proveyendo, sin duda, alimento y vestidos.

Su influencia como educadora
Fuerza y honor son su vestidura; y se ríe de lo porvenir” (v.25)

Fuerza” describe su carácter espiritual, mientras que “honor” define la calidad de su vida. Ambas son fundamentales para su integridad como maestra. Es verdaderamente espiritual, si no lo fuera, sus hijos no la escucharían ni obedecerían sus instrucciones.

Se ríe de lo por venir” significa que no le teme a lo futuro porque sabe que todas las cosas están en las manos de Dios. Todo estará bien en el futuro para ella porque está en relación correcta con Dios. Todo estará bien en el futuro respecto de su hogar porque lo ha mantenido en orden. Todo estará bien en el futuro respecto de sus hijos porque ha estado consecuentemente criándolos “en disciplina y en el temor del Señor (Ef. 6:4) Y todo estará bien respecto del futuro de su esposo porque su compromiso de administrar el hogar le ha dado al marido la oportunidad de ser un hombre de Dios.

“Abre su boca con sabiduría, y la ley de clemencia está en su lengua” (v.26) Su característica dominante cuando enseña es ternura… con palabras cariñosas y bondadosas, edifica y ministra gracia a sus oyentes (Ef. 4:29)

Su eficacia como madre
“Considera los caminos de su casa, y no come el pan de balde”.  (v.27)

Nunca sucumbe a la tentación de la pereza. En cambio se da cuenta de que la verdadera satisfacción solo puede venir de un esfuerzo supremo. Si ustedes, madres, invirtieran su vida en sus hijos durante la primera mitad de su existencia, recogerían los dividendos durante la segunda mitad. La esposa y madre excelente cría a sus hijos con sabiduría piadosa y con gran amor y cuidado. Ese es el diseño de Dios.

“Se levantan sus hijos y la llaman bienaventurada; y su marido también la alaba” (v.28) Hay otro beneficio; cuando sus hijos llegan a ser padres, seguirán su modelo en la crianza de sus hijos. Es por eso que la tierna dirección, el consejo sabio, la disciplina cariñosa, el santo ejemplo, el trabajo duro y el dar desinteresadamente constituyen las características vitales de la crianza.

Su excelencia como persona
“Engañosa es la gracia, y vana la hermosura; la mujer que teme a Jehová, ésa será alabada” (v.30)

Su excelencia como persona comienza con la dimensión espiritual. Las mujeres invierten horas intentando mejorar su apariencia externa se pierden de lo que tienen valor permanente… El ideal de la madre del rey Lemuel para la esposa excelente está resumido en los dos últimos versículos de Proverbios 31, cuando un hombre puede compartir su vida con una mujer que teme a Dios, se encuentra en las mejores circunstancias.



Tomado del libro: “Distintos por Diseño” de John MacArthur

No hay comentarios:

Publicar un comentario